Conocida también como piel de naranja, es una acumulación de tejido adiposo en áreas específicas del cuerpo, creando depósitos antiestéticos de grasa, líquidos y toxinas con una apariencia característica de hoyuelos o bultitos en la piel.
Personas de cualquier edad, en períodos de cambios hormonales como la pubertad o el embarazo. La razón radica en el efecto de las hormonas femeninas (estrógenos y progesterona).
Logramos la estimulación del sistema linfático para mejorar la circulación y eliminar las toxinas y grasas acumuladas.
Algunos de los tratamientos disponibles son:
La duración del tratamiento se adecúa al morfotipo corporal de cada paciente. Las sesiones se pueden realizar una por día, o por semana, con una duración de 15 minutos a hora y media, según las zonas a tratar. Se requieren de 10 a 20 sesiones. es importante que el paciente se comprometa a llevar una vida sana, acompañada de dieta y ejercicio, para lograr un resultado óptimo.